En la noche del pasado viernes, La Hermandad del Cristo de Gracia, y en concreto los jóvenes,
volvimos a darnos cita un año más en torno a nuestro Titular para festejar la Resurrección de
Jesús.
El rezo del Vía-Lucis, trazó nuestro particular “camino de luz” a la Cruz gloriosa de Cristo
resucitado. Un Vía-Lucis para volver a reiterar, con voz potente y decidida, que nada tiene
sentido sin el final, la Resurrección. La Resurrección colma de verdad el mensaje de Jesús, pues
sin ella, un cristiano no clamaría al árbol de la vida, sino a la cruz de muerte.
De la mano de Fray Jose Luis Obispo Ballesteros, siempre bajo las señas del carisma trinitario
redentor, recorrimos las 14 estaciones del Vía-Lucis, haciendo una reflexión cristiana y social
de cada una de las mismas, en forma de Oración. Fue una noche de oración, gracia, juventud,
luz y VIDA… Vida eterna.
